Tras despegar sin incidencias del aeropuerto La Guardia de Nueva York, el vuelo 1549 de U.S. Airways colisiona con una bandada de pájaros. Casi inmediatamente, ambos motores se detienen, dejando a los pilotos sin opciones. Al carecer de potencia para regresar al aeropuerto, sólo una salida parece viable: amerizar en el río Hudson.