La incursión de Sir Ernest Shackleton en el Endurance a la Antártida entre 1914 y 1916 es una de las más grandes historias de supervivencia de la humanidad. Esta expedición, la tercera de Shackleton, tuvo como precedente la trágica muerte del famoso explorador polar inglés Robert Falcon Scott. Shackleton se propuso ser el primero en cruzar la Antártida a pie y conquistar para su país este último gran desafío de la exploración terrestre. En agosto de 1914, mientras estallaba la Primera Guerra Mundial, la Expedición Transantártica Imperial de Shackleton partió de Plymouth (Inglaterra) a bordo del Endurance, un velero de madera de tres mástiles diseñado para afrontar el hielo. Shackleton bautizó a su buque con el nombre Endurance (resistencia) en honor a su lema familiar: “resistiendo conquistaremos”. Durante casi dos años, no se supo nada más de los 28 hombres que zarparon en el barco.