Entre 2000 y 2004, Ioan Clamparu, más conocido como «Cabeza de Cerdo» obligó a ejercer la prostitución a centenares de mujeres, en su mayoría rumanas. Vestía trajes elegantes, conducía coches de alta gama y se comportaba como un auténtico empresario. Nunca tuvo contacto directo con toda la trama.
La red de prostitución que controlaba en la Casa de Campo o en la Colonia Marconi, en Madrid, fueron negocios multimillonario que le convirtieron durante años en uno de los fugitivos más buscados por la Interpol y por la Policía española. Doce años de intensa búsqueda con un final inusual. El pasado 22 de septiembre, ‘Cabeza de Cerdo’ se entregaba a la policía, cansado de huir y de vivir en la clandestinidad. En este reportaje de Equipo de Investigación conoceremos la historia de este empresario criminal.