En 1987, en una pequeña población de Cantabria llamada Reinosa, sucedieron unos acontecimientos que pusieron de rodillas a las fuerzas de seguridad del estado español, y que aún hoy en día siguen siendo ejemplo de lucha y resistencia popular en todo el mundo.
Este documental, quiere ser un humilde y solidario homenaje a los hombres y mujeres que durante aquellas semanas demostraron con dignidad y coraje, como los pueblos son capaces de escribir su propia historia.
“La piel de los pueblos está llena de cicatrices. Las huellas de las agresiones cometidas por los profesionales de la humillación, al servicio de los mismos de siempre”.
Desde Fuente Ovejuna hasta Reinosa, pasando por Casas Viejas, la historia nos enseña como los poderosos son incapaces de encajar los golpes que tan acostumbrados están a dar. Ésta es la historia de un pueblo que no quiso convertirse en espectador de un crimen”.